viernes, 15 de abril de 2011

Las apariencias engañan.

Es inevitable sentir dolor al ver que cada día te alejas un poco más de mí. Vas dejando atrás miles de sentimientos que segundo a segundo van muriendo, haciendo que duela cada poro de mi piel. Ya no noto mi corazón, tu traición hizo que dejara de latir repentinamente y dejara paso al silencio, a la muerte en vida, al dolor, a la añoranza y a la soledad. Porque así me siento si tú me abandonas.. Sola, hundida, abatida. Delante de mí hay un gran abismo, en el cual siento que voy a caer de un momento a otro. Aparentemente estoy viva, pero en mi interior sólo hay muerte. Ya sabéis, las apariencias engañan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario